18 agosto 2009

Caravana 2009. Día 11

18 de agosto, martes.
Hoy el día amanece soleado, y vamos a completar la visita a Copenhage, para lo que una vez preparados, ponemos DSC_4029 a cambiar las agüitas a la caravana, operación que Pedro supervisa con mucho interés, como siempre.
Visitamos la fábrica de cerveza Calsberg, donde papá se pide a media mañana una copa de líquido amarillo con burbujas, tras lo que al montarse en la caravana pide a mamá “algo para empaparlo”, cosa que a las 11 de la mañana me suena raro…., pero los papás son así.
DSC_4048
Seguimos por la fábrica de porcelana de Royal Copenhage, donde mamá se aplica especialmente, mientras que papá se imagina pagando los destrozos de dos niños corriendo entre vajillas de a XXXXXX euros la pieza.
Como todo este trajín nos da mucho apetito, paramos a comer cerca del planetario, y después nos vamos a ver la iglesia de Grundtvigs, DSC_4055 que impresiona más de lo que dice la guía. Además nos sorprende mucho que está todo abierto, sin vigilancia, y que hasta tiene baños dentro de la iglesia….
Como todavía son sólo las 15 horas, mamá decide hacer un poco de shopping (papá dice que intente cuidar un poco la VISA, que ya está churruscada), y nos vamos con papá de paseo, y subimos la Round Tower, desde la que se vé un panorama impresionante de toda la ciudad, así que por el mismo precio nos quedamos un buen rato arriba, lo que aprovechamos para hacernos amigos de todos los españoles que suben por allí (a esta hora, los daneses empiezan ya a pensar en la cena, y nosotros en que es casi la hora de levantarse de la siesta…)
DSC_4064
Y como lo prometido es deuda, nos vamos al Tívoli, a montar en todas las atracciones que  podamos, aprovechando que es lo único que cierra en un horario más o menos decente (hasta las 12 de la noche, nada menos…). El parque nos resulta espectacular DSC_4088 por lo bonito de las instalaciones y el ambientazo que se respira, así que hasta hacemos la cena allí a base de perritos calientes y patatas.
Tras la cena nos da el bajón, ya que tenemos otro paseo hasta donde hemos aparcado la caravana, por lo que nos quedamos fritos antes de llegar a la zona de dormida, en un aparcamiento en medio de Copenhague, rodeados de italianos.
Y como otra vez vuelve a ser muy tarde, nos acostamos con medio suspiro y regresamos a los brazos de Morfeo…zzzZZZZzzzzz

1 comentario:

julioignaciorojo@gmail.com dijo...

Lo que más me gusta? El lenguaje directo con que contáis las "aventuras". De aquí a unos años quien lea esto dirá: Que niños tan inteligentes! Cómo se expresan de bien! Parecían adultos disfrazados de niños! Así se escribe la historia, amigos. Losé de buena tinta. Un abrazo. Julio