01 septiembre 2010

Sicilia 2010 (VII). 1 de septiembre

Tras el “parón” viajero del día anterior, salimos con las pilas cargadas hacia uno de los destinos que a priori nos apetecía más ver: Siracusa.

Empezamos por la zona arqueológica de Neapolis, bonito conjunto de monumentos de diferentes épocas, con la misma “presentación” desastrosa para el turismo, al típico estilo siciliano de “búsquese la vida”.

La primera parada es para comprar las entradas y ojear un poco en las tiendas de la zona de “entrada” al complejo.

Shopping en Siracusa

Empezamos por el Anfiteatro Romano, encontrado por casualidad al hacer unas obras (lo normal por estos lares…)

Anfiteatro romano de Siracusa

Tras ver el Altar de Hieron II (como el Asador Donostiarra, pero a lo bruto), un paseo hacia la ¿tumba? de Arquímedes, vemos las Latomías, cerradas en gran parte por abandono (Sicilian’s style), y nos hacemos la típica foto en la oreja de Dionisio.

Entrada al Orecchio di Dionisio

Después, con el estómago rugiendo, y un sol de justicia, subimos al teatro griego, que nos gusta más que el de Taormina (mucho más…)

En Siracusa, teatro griego

Teatro griego de Siracusa

Una vez vista esta zona, bajamos a la isla de Ortigia a ver un poco el mar y callejear por esta zona tan singular. Nos sorprende el interior del Duomo, donde se aprecian las columnas del antiguo templo de Atenea.

Duomo de Siracusa

Callejeando por Ortigia

Una vez recorrida toda la isla, ponemos rumbo hacia Noto, otra bonita ciudad en la que se aprecia un importante esfuerzo por la restauración de los monumentos y la puesta en valor de su patrimonio. Destacan los palacios, iglesias y edificios oficiales, con un gran ambiente en la ciudad.

Palazzo Nicolaci

Torre de San Carlo al Corso

En la ruta de vuelta hacia Kamarina, decidimos pasar por Cava d’Ispica, también declarada Patrimonio de la Humanidad, pero ya se hace tarde y sólo podemos apreciarlo desde fuera.

Nocrópolis de Larderia

Esa noche la sección infantil ha preparado un espectáculo en el resort, con temática egipcia, y después de un rato muy divertido apreciando las aptitudes de bailarines de la pareja, llegamos rendidos a la habitación, mientras que preparamos el equipo para la excursión del día siguiente.

La artista tras el espectáculo

1 comentario:

julioignaciorojo@gmail.com dijo...

Me encanta seguir vuestro reportaje por tierras de la isla Sicilia. Realmente la vais recorriendo palmo a palmo y encontrando novedades. Aunque muchas cosas están ya fotografiadas, no es mismo verlo sobre el terreno que contemplarlo en un libro o en una propaganda turística.
Cuando pongáis el punto final veré nuevamente el reportaje entero para tener una visión de conjunto.
Estáis hechos unos reporteros y unos periodistas profesionales. Creo que se os puede felicitar por ello tanto a los grandes como a los chicos. Un ab razo. Julio