Como al final lo del regalo era verdad y el viaje nos salió gratis, nos fuimos la última noche a observar la "fauna" local.
Así quye nos sentamos en la terraza más "fashion" de la isla y nos metieron un clavo del que todavía nos acordamos. Pero eso sí, vimos Vuitones, Rolex y Chaneles a punta pala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario