Como es tradición todos los años, este 28 de mayo hemos vuelto a añadir un año a nuestra vida, así que coincidiendo con que caía en sábado, hemos hecho grandes festejos el fin de semana.
El mismo sábado 28 celebramos el cumple en casa, con la familia y amigos, y para no fallar a la tradición, todos comieron y bebieron como leones. También hubo piñata para los más pequeños, bajo la atenta mirada de Dora la Exploradora.
Después de la piñata atacamos la tarta, que este año venía con una casita del bosque donde habitaba Blancanieves.
Cuando acabamos los manjares, y antes de irnos a acostar, nos hicimos una foto de recuerdo, que no pase como otros años que se nos olvida y luego tenemos que hacer un poco de Photoshop para vernos juntos… je je
Pero el fin de semana de festejos no acababa aquí, ya que el domingo habíamos invitado a los compañeros del cole y a algunos amigos de San Rafael de años anteriores, así que nos liamos una buena en el DinoPeppino con todos ellos, y nos trajeron un montón de regalos que casi no cabían en el coche de vuelta a casa.
Y después de todo el fin de semana de fiesta (y la carrera Liberty del domingo con papá, que fue otra batalla), acabamos rendidos en la cama, empezando ya a contar los días que quedan hasta los 8 años… 365, 364, 363… zzzZZZzzzzz